¿Qué queremos hacer?

El principal objetivo de Rutopia es el de conocer, documentar y difundir propuestas de muy diversos ámbitos, que desde nuestro punto de vista representan una forma diferente de entender las relaciones entre los individuos, una manera alternativa de convivir con el entorno natural. Propuestas que en pocas palabras están sentando las bases de una sociedad más justa, feliz y sana.

Grupos de consumo local, talleres y tutoriales con la filosofía “Hazlo Tú Mismo”, plataformas educativas que ofrecen cursos gratuitos, aplicaciones de alojamiento gratuito… Estas son sólo algunas de las muchas iniciativas que nos demuestran que un nuevo espíritu colaborativo, crítico, empoderador e inclusivo está ganando fuerza. No obstante existen infinidad de pequeños grandes proyectos que siguen pasando desapercibidos para muchos de nosotros. Cooperativas, ecoaldeas, asociaciones, grupos de trabajo… a pocos kilómetros de tí están profundizando sobre conceptos como la autosuficiencia, la sostenibilidad o la autogestión y seguramente no los conoces. Esto hace que a pesar de que están desarrollando experiencias muy interesantes, a menudo carezcan de las manos y el impulso necesarios para mantenerse en el tiempo.

¿Por qué queremos hacerlo?

Aunque son muchas las razones que nos empujan a creer en este proyecto hay una que las resume: nuestra fe en las personas. Tenemos una firme convicción de que el cambio que necesitamos está, si así lo perseguimos, en la palma de nuestra mano, porque tenemos una capacidad enorme para reinventarnos, para aprender, para adaptarnos, para acertar después de habernos equivocado una y otra vez, para perseguir con perseverancia un ideal… y hacerlo realidad. Estamos convencidos de que la gente, la gente ordinaria que no ocupa titulares en los periódicos ni puestos de dirección en grandes empresas, tiene un poder enorme para cambiar su mundo, y por tanto para cambiar la realidad de todo el planeta. Y con este proyecto lo que queremos hacer es demostrarlo. Y lo vamos a demostrar, solos o con tu ayuda :).

Tenemos también una gran motivación por conocer, por aprender todo lo posible a lo largo de nuestro viaje. ¿El qué? Pues todo lo que las personas que conozcamos nos quieran enseñar: cultivar, reparar, construir, remendar, cocinar, inventar… Y lo queremos compartir con vosotros, a través de las reseñas y a través de nuestro blog. Para que Rutopía se convierta en una pequeña ventana a este mundo en crecimiento que está proponiendo una alternativa tan ilusionante.

¿Qué buscamos?

En Rutopia tienen cabida proyectos de cualquier ámbito, desde la educación hasta la artesanía, pasando por la salud o la alimentación. El denominador común a todos ellos es una serie de principios o valores que a grandes rasgos se pueden resumir en 4 grandes grupos, los cuales a su vez engloban otros conceptos relacionados:

A. Autosuficiencia

Asumir la gran responsabilidad de volver a ser soberanos de lo que comemos, vestimos y habitamos, nos hará individuos más libres, más sanos y más capaces, con una renovada dignidad que volverá a estar en la palma de nuestra mano. Por ello en Rutopía buscamos proyectos que empleen recursos locales y variedades autóctonas, que se esfuercen en crear su propia cultura, que conozcan las peculiaridades de su entorno natural y humano y sepan adaptarse a las mismas… Proyectos que en definitiva apuesten por el autoconsumo a todos los niveles.

B. Interdependencia

Para no caer en el aislamiento, la autosuficiencia debe estar complementada con interdependencia, la capacidad para entender que las dependencias mutuas existentes entre individuos y/o colectivos deben producirse en condiciones de igualdad y enriquecimiento recíproco. En este sentido nos interesan especialmente los iniciativas que están abiertas a nuevos miembros, que establecen relaciones de intercambio y colaboración con otras, sin tener que sacrificar a cambio, claro está, su autonomía.

C. Autogestión

Otra de las características que buscamos en los proyectos que visitamos es una total autonomía en la toma de decisiones, a través de asambleas en las que el consenso se alcanza sin jerarquías y con la participación directa de sus miembros. La autogestión conlleva un compromiso por parte de cada integrante, por el cual se hace responsable de llevar a cabo aquello que junto al resto ha decidido.

D. Sostenibilidad

La capacidad para minimizar nuestro impacto medioambiental,   reciclando nuestros residuos y reduciendo al máximo nuestro consumo de energía y recursos, es hoy más necesaria que nunca. Por ello, como no podía ser de otra manera, valoramos aquellos proyectos que se esfuerzan por hacer más con menos. No obstante no queremos circunscribir la sostenibilidad al ámbito ecológico, y entendemos que un proyecto verdaderamente sostenible es aquél que establece vínculos duraderos de mutua interdependencia entre sus miembros y sus miembros y el entorno natural y humano.

Tomando como referencia estos 4 grandes ámbitos, algunas de las características concretas que buscamos en los proyectos que visitamos son las siguientes:

> No buscan lucro económico. La obtención de un beneficio económico no se trata como un objetivo sino como algo inevitable en un mundo que funciona con dinero. En compenetración con otros proyectos del entorno se tratan de suplir las necesidades, cada vez en mayor medida, sin el uso del dinero (aquí puedes obtener más información).

> Son sostenibles en el tiempo, y por tanto 1.) no comprometen la capacidad de las generaciones futuras para cubrir sus necesidades, 2.) repercuten en el bienestar del entorno natural y humano, 3.) cuya perdurabilidad dependa lo menos posible de agentes externos (situación de la economía, financiación, políticas del gobierno…) y esté en la mayor proporción en las manos de sus integrantes, 4.) con capacidad de adaptación a fenómenos sociales y naturales.

> Son participativos y abiertos, primando la colaboración y el intercambio frente a la competencia, buscando diseminar el conocimiento y hacerlo crecer compartiéndolo. Los proyectos además son parte integrante de la vida de quienes los integran, manifestación de sus propios principios, necesidades e inquietudes.

> Tienen una gestión horizontal y directa. Todos los integrantes pueden aportan sus ideas sobre su proyecto y se responsabilizan a llevar a cabo las consesuadas en asamblea.

> Se desarrollan en equilibrio con el entorno humano y natural. Se busca minimizar la energía utilizada, maximizando la proporción de recursos locales utilizados. Se trata también de reducir al máximo los residuos generados, los cuáles son siempre tratados como un recurso y no como un residuo.

Objetivo a largo plazo

Al finalizar el viaje intentaremos, aunque de momento es más un deseo que un proyecto maduro, crear una red social en la que proyectos alternativos puedan darse apoyo mutuo, intercambiando conocimiento, capacidades y necesidades. Un lugar donde además aquellos que aún desconocen este mundo puedan obtener información de los distintos lugares y personas que están protagonizando el cambio.